Bienvenidos "quemeros"

Este es un sitio donde tenemos, todos los que amamos a Huracán, la posibilidad de opinar sobre aquello que haga referencia a la actualidad del club de Parque Patricios.

domingo, 22 de mayo de 2011

Huracán es un verdadero caos.


Ya no falta nada para demostrar que Huracán es el reflejo de la debacle, de la anarquía y de la desunión de un club que fue ejemplo de un estilo futbolístico en los años 70 y principios de los 80. En todos los medios de comunicación, radiales, escritos, televisivos y online ya se cansaron de sumergir al Globo y sepultarlo como uno de los próximos clubes a descender al Nacional B.

Méritos sobran para que Huracán sea ejemplo de lo que no se debe hacer con una institución deportiva donde el fútbol es materia principal y donde las distintas dirigencias de los últimos treinta años cometieron errores en cadena y donde el actual Presidente, el Sr. Carlos Babington y sus secretarios no encuentran soluciones a la realidad y por el contrario se sumergen en la soberbia para encerrarse en su burbuja con lo cual solo consiguen el desmembramiento y derrumbe del club.

Un cuerpo técnico que no encuentra el rumbo y un plantel de jugadores que no conforman un grupo, ya desde principio de año y con Miguel Brindisi como entrenador. No hay reacción y cada rival parece el Barcelona de Guardiola por las diferencias que marcan sobre el Globito en cada partido. Ya dijimos que es igual Godoy Cruz que Villa Mitre de Bahía Blanca. No hay rival más difícil que el mismo Huracán y su propia sombra. Los jugadores muestras impotencia y falta de orden a tal punto que ya ni Gastón Monzón brinda tranquilidad desde la valla.

Huracán es un verdadero caos y si en la semana se hablaba que quizá se podría generar disturbios en la Platea Miravé, cómo el jefe del operativo policial y desde la conducción del club no tomaron las medidas que eran previsibles. Todo es un desorden y una improvisación por Parque Patricios. Luego llega la queja y el contragolpe simple y desproporcionado de la Policía qué reprime a un grupo de socios de Huracán y que no tiene las "agallas" para enfrentar una usurpación en la vía pública.

El Reino del revés diría alguna voz más inteligente y pensante para corroborar el presente del Globo, que deambula inmerso lleno de interrogantes y camino del mismo infierno generado entre cuatro paredes y producto de la altanería de unos pocos creídos monarcas aferrados a un sillón prestado del cuál interpretaron que sería eterno su uso, pero también su abuso.



Jorge Aja García.